miércoles, 28 de febrero de 2007

Llegan tiempos de renovación

Tras un largo periodo de estancamiento y de declive, se aproxima la sucesión en las varas de una de las Hermandades mas antiguas y señeras de esta nuestra querida ciudad. Cambio necesario, y renovación imprescindible para hacer de esta Hermandad lo que fue, lo que siempre tubo que ser y nunca debió de perder, perdida que quizás fue ocasionada por la dificultad de fe o por los entresijos de esta sociedad que nos ha tocado vivir o quizás por la madurez de sus representantes y su estancamiento en una época y su involución hacia el futuro.

La sucesión llegará pasada la Semana de Pasión, en ella los que se marchan recibirán el agradecimiento de todos y cada uno de sus hermanos y de todos los Cofrades en general y los que entran el apoyo de todos y cada uno de los que formamos la “familia pasional” de esta nuestra Semana de Pasión.

Tras unas breves palabras mantenidas con el futuro responsable, me dio la impresión de sensatez, de persona analista y visión de futuro, de los que sin pretender imponer sus posturas llegan a un consenso con las demás partes implicadas. Con todo esto, me pareció que la Hermandad quedará en buenas manos, manos que espero tengan la ayuda necesaria, aunque en la actualidad tenga una Junta de Gobierno escasa y con poco apoyo, pero que a buen seguro cumplirá con todas y cada una de las responsabilidades que se les avecina y que hará que su Hermandad llegue al esplendor que merece su imagen titular.

Grandes retos tienen por delante la futura Junta de Gobierno, cambio de estatutos, diseño de nueva estación penitencial, reflotación de la Hermandad, pero uno sobre todo fundamental y muy difícil, hacer ver a sus hermanos que las cosas han cambiado y que han de olvidarse de los malos vicios adquiridos a lo largo de los tiempos y que poco o nada han ayudado y que han hecho mucho daño a la Hermandad, para ello necesitará de mano firme y mucho apoyo por parte de toda la “familia samanasantera”.

1 comentario:

Lucano dijo...

Ojalá sea así, y con el ánimo de todos los que lo deseamos, unas y otras cofradías vayamos mejorando y afianzándonos. A trabajar.